Desde hace unos años ayudo en un comedor comunitario para hombres sin techo.
El martes pasado, a la hora del postre, me frenó un señor y me dijo "te voy a cantar una canción colombiana", y acto seguido sacó del bolso un sombrero de paja y un enchufe de impresora. El sombrero se lo puso y el enchufe lo usó de micrófono imaginario, para el deleite de sus compañeros de mesa. No pude hacer más que quedarme parada con una jarra en cada mano riéndome de su ocurrencia y escuchando su canción. Cuando terminó apoyé las jarras y lo aplaudí como correspondía.
Ayer se fue rápido, fue uno de los primeros. Como le dije chau se frenó y me explicó que en realidad estaba apurado porque se iba a correr el rally. (?) Y que era el número 14, porque ayer fue martes 13.
Ahhh entiendo, mire usted! Que le vaya bien y hasta el martes que viene será.
No hay comentarios:
Publicar un comentario